Hay personas que trabajan toda su vida sin descanso, dedicando todos sus esfuerzos a intentar conseguir un sueldo digno y mantenerse a flote.
En su caso, conseguir ingresos está ligado a trabajar más horas.
Otras personas, en cambio, se dedican a gestionar sus inversiones y estas crecen de forma exponencial, porque parte de los beneficios la dedican a realizar más inversiones.
Dos polos opuestos de una misma realidad. ¿Cómo puede ser posible?
Para Robert Kiyosaki la razón es la incultura financiera que tenemos.
Kiyosaki nos explica estas diferencias basándose en un concepto que él mismo acuñó: el cuadrante del flujo del dinero.
Aunque parezca una idea compleja, en realidad es sencilla de entender.
Y quizá aquí radique el origen de un cambio de paradigma en tu propia concepción del futuro y de cómo deseas vivir.
¿Qué es el cuadrante del flujo del dinero y cómo funciona?
El cuadrante del flujo del dinero se refiere a un concepto acuñado por Robert Kiyosaki.
Norteamericano de origen japonés, Kiyosaki es empresario, escritor, inversor, orador y conferenciante motivacional y empresarial.
Sus libros se convierten en auténticos best sellers y cuentan con numerosas publicaciones derivadas, lo que las ha convertido en marcas en sí mismas.
A través de sus obras, Robert Kiyosaki difunde el concepto de educación financiera, que propone como una necesidad esencial académica que debería ser incluida en los sistemas educativos en todo el mundo.
Es el principal promotor de las teorías propias que expone en sus libros sobre la gestión de las finanzas, que persiguen la libertad financiera y que son parte de una nueva concepción sobre la gestión de la economía.
Ha generado todo un movimiento en todo el mundo y no somos pocos los que lo defendemos y seguimos.
Robert Kiyosaki es un viejo conocido de este blog y te he hablado de él en numerosas ocasiones.
Una de ellas es en referencia a su libro Padre rico padre pobre sobre al que dediqué en su momento un artículo completo.
En este libro ya aparecía el concepto del cuadrante del flujo del dinero, que trata específicamente el tema en otra obra, El cuadrante de flujo de dinero: Guía del padre rico para la libertad financiera.
El cuadrante del flujo del dinero es un diagrama que plasma las cuatro maneras que permiten ganar dinero y generar ingresos. Representa los cuatro estadios de la vida profesional.
El cuadrante del flujo del dinero
Kiyosaki establece que el aspecto profesional de una persona se puede estructurar en cuatro estadios, que dibuja en un diagrama, en un cuadrante. Estos estadios representan las diferentes formas por las que se pueden generar ingresos.
El cuadrante del flujo del dinero se estructura así: Empleado, arriba a la izquierda; Autónomo o freelance, abajo a la izquierda; Dueño, arriba a la derecha; e Inversor, abajo a la derecha.
Veamos las características de cada uno de ellos.
Empleados
La mayor parte de la población se ubica en este cuadrante, el de los empleados, que ocupa la parte superior izquierda.
Este modelo responde a un intercambio de tiempo y esfuerzo a cambio de dinero. En consecuencia, si no se trabaja tampoco se recibe ninguna remuneración, salvo las excepciones estipuladas de bajas por enfermedad o permisos de días libres.
Sus ingresos dependen de lo que sus superiores hayan estipulado. Se trata de ganancias lineales, porque el sueldo es siempre el mismo, independientemente del beneficio que obtenga la empresa.
La posibilidades de poder aumentar la cantidad de dinero que se percibirá dependerá de los aumentos de sueldo o de los ascensos, pero serán siempre poco frecuentes y excepcionales.
El perfil de personas que están en este grupo tienen como motivación la seguridad que ofrece un puesto de larga o indefinida duración y de tener la certeza que, en condiciones normales, cobrarán todos los meses.
Aunque analizando de forma rigurosa esta sensación de seguridad podríamos decir que es falsa, y no hay más que comprobar quiénes son las primeras víctimas en épocas de crisis, a este tipo de personas les aporta tranquilidad el contar con un puesto de trabajo fijo.
Estas personas sacrifican toda su vida y se atan a un trabajo por un sueldo, con la esperanza de poder disfrutar de la vida cuando alcancen su jubilación, ya en la madurez.
Autoempleados
Los autoempleados o profesionales autónomos se sitúan en el cuadrante inferior izquierdo.
Estas personas trabajan por cuenta propia y muchas de ellas tienen profesiones liberales, como abogados, médicos, consultores, asesores, etc.
Son sus propios jefes y valoran el hecho de ser independientes y poder disfrutar de la autonomía que ofrece no tener que rendir cuentas a otras personas.
Este perfil también intercambia su tiempo por dinero. Pero, a diferencia de los empleados, los autoempleados no cuentan con la seguridad de saber el sueldo que cobrarán a final de mes.
Se trata de ingresos que fluctúan dependiendo de lo que hayan facturado en ese espacio de tiempo.
Los autónomos también comparten con los empleados el hecho de que si no trabajan, no ganarán dinero.
Como partes menos ventajosas, a nivel de cobertura social, cuentan con poca protección para casos de enfermedad o invalidez y las pensiones que pueden percibir no se corresponden con la dedicación de tantos años. Fiscalmente tampoco cuentan con tantas ventajas.
Así que, si bien sus ingresos económicos pueden ser más elevados que los de los empleados, en conjunto su situación no es mucho mejor que la de ellos.
Empresario
Los empresarios o dueños de empresas se sitúan en la parte superior derecha del cuadrante.
Este perfil de personas han activado estrategias para generar flujos de dinero que no dependan exclusivamente de su trabajo y en la parte táctica, cuentan con personas a su cargo para que hagan el trabajo en su lugar.
En consecuencia, en este caso pueden recibir ingresos sin la necesidad de estar trabajando.
Este perfil funciona con una estrategia: los empresarios ejercen liderazgo y asumen riesgos con la confianza de conseguir mayores ingresos.
Sus empresas trabajan para estos empresarios y no al revés.
Inversor
Los inversores ocupan el cuarto cuadrante, en la parte inferior derecha.
Este perfil se caracteriza porque buscan soluciones para conseguir que el dinero trabaje por ellos. Así que su trabajo se convierte en buscar esas oportunidades que les generen los mayores beneficios posibles y gestionar sus inversiones.
Esto supone que siguen realizando inversiones para generar más dinero todavía.
Como habrás deducido, estas personas tienen un gran conocimiento de cómo funcionan las finanzas.
Para Kiyosaki, este es el perfil que consigue la libertad.
Conclusiones
El lado izquierdo del cuadrante (Empleado y Autoempleado)
El lado izquierdo del cuadrante es, para Kiyosaki, el de los pobres, el de los E, empleados y los A, autoempleados. Y, atendiendo a las cifras, el 95% de la población forma este grupo. Pero, en cambio, su riqueza tan solo supone el 5% del total.
Como hemos visto, sus ingresos son lineales. Esto significa que para ganar más deberán trabajar más. Pero el tiempo es finito y, por lo tanto, sus ingresos están limitados.
El lado derecho del cuadrante (Empresario e Inversor)
En el polo opuesto encontramos al 5% restante de la población. El grupo E, los empresarios y el I, el inversor. Este es el lado de los ricos.
Pero el 5% de la población tiene el 95% de la riqueza.
Respecto a los ingresos, son pasivos y sus activos trabajan por ellos. Pero, además, son exponenciales, porque no tienen límites.
Su dinero trabaja por ellos y no hay nada que los pueda frenar. Así que la riqueza de este grupo crece cada día.
Seguro que te preguntas qué negocio puedo poner en mi casa que sea rentable.
En este caso, estos perfiles cuentan con dinero y también con tiempo.
Así que esta parte del cuadrante es la que consigue la libertad financiera.
Espero que te haya quedado claro cómo puedes pasar del cuadrante de la parte izquierda a la derecha. Tendrás que invertir en activos, poner a trabajar tu dinero.
Y ahora, ¿en qué parte del cuadrante estás y en cuál te quieres posicionar?
Para pasar al lado derecho, haz clic aquí.